¿Qué sería de la tecnología de información sin la infraestructura y aplicaciones? Tan solo un concepto sin aplicación práctica. Pese a ello, la infraestructura, si bien está presente en la agenda del responsable de tecnología, también llamado CIO, es un tema cada vez más devaluado y que despierta poco entusiasmo, y a veces hasta rechazo, en los restantes niveles “C” de la organización. La letra C indica que se trata de un responsable de alto nivel (Chief).
Pese a lo que suele opinar el Chief Information Officer (CIO) o el Chief Technology Officer (CTO) promedio, la infraestructura es, hoy en día, un simple commodity en las organizaciones: es fungible, no agrega valor al negocio, no otorga ventajas competitivas, no es un bien escaso y es accesible para cualquiera. Adicionalmente, en muchos casos es un gran dolor de cabeza para el CIO y, aún más, para el Chief Executive Officer (CEO).
Cada vez es mayor el número de aplicaciones que no son de misión crítica, que se ubican fuera de los límites físicos de las organizaciones. Lo vemos en el uso cada vez más común de herramientas de oficina (procesador de textos, planillas de cálculo, correo electrónico, etc.) a través de servicios tercerizados (ej: Google for Work). A esto lo va a seguir la tercerización paulatina de otros servicios de infraestructura (servidores, back bones de comunicaciones, procesamiento de EDI, etc.)
Sin olvidar los interrogantes que esta tendencia abre ( ¿Es seguro? ¿Dónde están mis documentos? ¿Cómo evito que alguien no autorizado pueda acceder a ellos? etc.), la adopción de Software as a Service (SaaS), por ubicuidad y gratitud, se va a convertir de gradual a masiva en el transcurso de los próximos años. Incluso algunas organizaciones, luego de establecer los estándares de seguridad adecuados, van a comenzar a adoptar estas soluciones, más que nada por el fuerte impacto en ahorro de licencias de software que podrían tener.
Por otro lado, será difícil que el segmento de soluciones de gestión vea una merma en su demanda. El alto grado de personalización que se requiere para las soluciones ERPlas descarta, en principio, como candidatas para SaaS, lo que refleja en los resultados de la encuesta en relación a mantener los Datacenter operativos. Esto a su vez se traduce en un alto costo de operación y en importantes inversiones todos los años a fin de mantener y/o expandir las funcionalidades de los aplicativos.
En cambio es muy probable que CRM y Payroll vayan a ir migrando paulatinamente a un modelo de SaaS ya que no son aplicaciones críticas del negocio. Más aún si se tiene en cuenta el nivel de especialización normativa requerido para el mantenimiento de Payroll y el hecho de que ya existen CRM gratuitos en el mercado que constituyen una alternativa importante a los paquetes “off-the-shelf”
Business Process Management (BPM) es más una disciplina que una tecnología. Como disciplina, para ser implementada con éxito requiere cambios culturales profundos en las organizaciones, un nivel de Management maduro y comprometido con estos cambios y un equipo de profesionales especializados y con experiencia. BPM demanda una drástica adecuación de todas las soluciones de software utilizadas, a fin de convertirlas en elementos flexibles y rápidamente adaptables a los cambiantes procesos de negocios. Es por ello que el grado de adopción y adecuada utilización de BPM es y continuará siendo lento.
Todos los cambios en la ubicación física y en la explotación de la infraestructura van a modificar radicalmente al área de IT como la conocemos hoy día. De ser un prestador interno de servicios de infraestructura se va a reconvertir en un controller de los servi- cios que, sobre el particular, estén prestando los proveedores de la organización.
Esto implica a un fuerte cambio en los roles y conocimientos del área específica de Infraestructura. En lugar de lidiar con Hardware, Software de oficina y usuarios, el CIO va a tener que aprender a lidiar con los proveedores y empezar a preocuparse por los Key Performance Indicators (KPIs), Service Level Agreements (SLAs), costos, modelos contractuales, negociación y tiempos de respuesta.
Fuente: La Visión TIC de los CIOs, Usuaria Research, 2015
Adaptado por la División Consultoría de EvaluandoSoftware.com